viernes, 27 de abril de 2007

La higuera de Ramiro Pinilla

Unas lineas sobre el autor:

Ramiro Pinilla nació en Bilbao en 1923, premio Nadal y el Nacional de la Crítica en 1961 con "Las ciegas hormigas". Premio Euskadi 2005 y de nuevo el Nacional de la Crítica en 2005.
La primera novela que me llego a mis manos de él fue "La tierra convulsa", la primera parte de su trilogía "Verdes valles, colinas rojas" , no la termine de leer, se la preste a mi suegra Carmen y a ella le encantó, le recordaba el ambiente de su infancia en Eibar.

La novela La higuera, es del 2006; relata la historia de una relación entre un falangista, un niño de 10 años, hijo de un maestro fusilado por el falangista y una higuera...una relación que se inicia en 1937 y que durante 30 años nos mantendrá "enganchados" a su historia.

Las primeras páginas se me hicieron un poco duras, ya que cuenta la entrada de los falangistas en Bilbao y Getxo, ...empezaba a pensar que sería una novela enfocada desde la perspectiva "progresista", con un espíritu de revancha... contando los "paseos" nocturnos de los falangistas.
Con la perspectiva del tiempo y la edad...los fusilados y paseos nocturnos los hubo en ambos bandos, y lo que menos me apetecía era leer un pasquín reivindicativo.

Pero la novela engancha, te descubre que incluso en la misería de la guerra hay personas buenas, con conciencia, que el bien no sabe de colores, ni de ideologías, y personas que necesitan creer en algo para seguir adelante. Y aunque el protagonista, también se mueve por el miedo, los ojos de un niño le tocan el corazón, el odio que el vé en esos ojos le marcan y condiciona el resto de su vida...Y lo más importante, el perdon del niño: Gabino.

Resumiendo, una novela fácil de leer, que engancha...tienes necesidad de saber el final, los motivos que lleva a un hombre a dedicar su vida a cuidar una higuera...temor, arrepentimiento... Y en estos tiempos que corren habla del perdon, que no del olvido.

Intentaré retomar la trilogía "verdes valles, colinas rojas"..seguro que merece la pena.

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